La espada griega (xifos) no era una simple daga, sino un arma de guerra que podía sustituir a la lanza en el combate directo, en el cuerpo a cuerpo. La espada del hoplita tenía una hoja rectilínea con doble filo. Podía tener una longitud total, puño incluido, de 60 cm. Se llevaba colgada del hombro izquierdo mediante un talabarte. Después de las Guerras Médicas, el hoplita utilizaba asimismo una espada corta, tan sólo un poco más larga que un puñal.
El término griego antiguo kopis significa pegar, golpear y podía describir en la Antigua Grecia a un cuchillo con filo curvado hacia adentro, usado principalmente como herramienta para cortar carne, o para sacrificar animales, o a una o espada pesada para cortar y apuñalar con una forma similar.
La espada Kopis estaba diseñada para ser usada con una mano, con una hoja de hasta 65cms., haciéndola de un tamaño muy similar a la spatha. Los ejemplares macedonios posteriores tienden a ser más cortos, con una hoja de aproximadamente 48 cms.
El kopis tenía un solo filo que se curvaba hacia adentro, resultando cóncavo en la zona cercana a la guarda, pero volviéndose convexa cerca de la punta.
Esta forma, generalmente denominada «recurva,» distribuye el peso de manera tal que el kopis era capaz de dar un golpe con el momentum de un hacha, manteniendo a la vez el filo largo de una espada y la capacidad de apuñalar.
Esta espada se introdujo en Grecia a finales del siglo VI a. C. Aunque el xifos, la espada normal de los hoplitas, siguió usándose en la época macedonia, el kopis ganó mucha mayor popularidad, y gradualmente fue reemplazando a la espada hoplita.