La Wakizashi, también conocida como Shōtō, es un sable corto tradicional japonés, con una longitud de entre 30 y 60 centímetros. Su forma es similar a la de la Katana, aunque el filo es generalmente más delgado y por tanto puede herir con mayor severidad.
Los guerreros Samurái llevaban la Katana y la Wakizashi consigo, denominándolas en su conjunto Daishō, literalmente «la larga y la corta».
La Wakizashi se usó desde un principio como arma de defensa para el Samurái, cuando no disponía de la Katana. Cuando un Samurái entraba en un edificio dejaba su Katana en un soporte junto a la entrada.
Sin embargo, podía llevar consigo la Wakizashi en todo momento, e incluso tenerla cerca mientras dormía para repeler cualquier agresión.
Al ser más corta y manejable, era más indicada para la defensa en espacios cerrados y el desenvaine era más fácil.
Debido a su tamaño también era utilizada por los Ninjas en sustitución del Ninjatō, el cual ocupa un lugar intermedio entre la katana y el wakizashi o kodachi.